Existen dos métodos para conseguirlo:
La mezcla de la luz de tres chips: un chip azul, otro verde y otro rojo
Mediante la combinación de un chip azul o ultravioleta y fósforos, tal como se hace con el principio de la fluorescencia.
El primer método rara vez se utiliza para producir un LED blanco, aunque sí para realizar juegos de colores, puesto que regulando la intensidad de cada uno de ellos podemos pasar por todo el espectro de colores.
Con el segundo método podemos obtener luz blanca fría o cálida en función de los fósforos que utilicemos.
Si usamos LED azul con fósforos amarillos, tendremos un LED blanco frío y relativamente de buena reproducción cromática. Ra sobre 70.
En el caso de usar fósforo rojos y verdes junto al chip azul podemos obtener un LED blanco cálido de mejor reproducción cromática, Ra > 80 aunque conseguiremos algo menos de flujo.